Antes de llegar a una conclusión de los hechos llevamos a cabo un proceso de razonamiento, según la situación que sea podemos aplicar varios tipos, razonamiento deductivo, inductivo, hipotético-deductivo y lógico, entre otros.
El uso de raciocinio es una de las características que nos distingue de otras especies, cada vez que tomamos una decisión no lo hacemos por impulso, de hecho detrás de cada acto por más sencillo que parezca se encuentra una intensa actividad mental que realiza nuestro cerebro para terminar ejecutando una acción.
Es a través del razonamiento que logramos tomar decisiones y resolver problemas por lo que el mismo implica atravesar muchas veces por un proceso de aprendizaje y reflexión, por ello es una habilidad cognitiva peculiar de los seres humanos.
¿Cuáles son los tipos de razonamiento?
No existe una única manera de pensar ni mucho menos de razonar, va a depender del fenómeno que se trate y de cómo procesemos la información, de este modo según los siguientes tipos de razonamientos podemos abordar la realidad, veamos a continuación:
Razonamiento deductivo
Con este tipo de razonamiento tomamos una idea o premisa universal para aplicarla a cada caso en particular de interés. Está infundado en las inferencias para poder adaptar un caso específico desde una creencia global aplicando la lógica.
El razonamiento deductivo se caracteriza porque siempre la conclusión va a derivarse de la premisa inicial, es decir, no es necesaria la práctica para llegar a la toma de decisiones, siempre se parte de una proposición universal dada así sea de manera forzada.
De esta manera con este tipo de razonamiento se pueden llegar a desarrollar juicios de valor que no necesariamente son verdaderos y carecen de argumentos ya que giran en torno a estereotipos universales llevando así a conclusiones erróneas.
Es la apología de razonamiento usada en la mayoría de las ciencias duras, como es el caso de las matemáticas y física debido a que sus fundamentos están basados en leyes universales que siempre aplican y funcionan de la misma forma; la frase “el orden de los factores no altera el producto final” viene asociado directamente con este tipo de razonamiento.
Un ejemplo de razonamiento deductivo: “Los seres humanos poseen piernas y brazos” cosa que infiere que todos los seres humanos gozan de una anatomía completa, conclusión que no siempre es cierta debido a que la premisa inicial no es globalmente verdadera.
Otro ejemplo con deducción global correcta: “Los planetas del sistema solar giran alrededor del Sol” por lo tanto,cualquier planeta en específico del que se hable en efecto sí gira en torno al sol porque responde a una ley universal.
Razonamiento Inductivo
Es lo contrario al razonamiento anterior, aquí se toman en consideración diferentes premisas específicas para intentar llegar a lo general, es decir, de un caso en particular formar una premisa general.
Se emplea para generar probabilidades por lo que dichas generalizaciones se encuentran abiertamente sujetas a cuestionamientos, no obstante la premisa general no condiciona la conclusión final sino que está sujeta a estudio a través de posibles inferencias en la observación de otros hechos.
La importancia del razonamiento inductivo es que gracias a él se da la falsabilidad de hipótesis, es decir evidencian a través de la lógica y los experimentos si un hecho es verdadero o falso, aspecto fundamental de la ciencia y sus avances desde sus inicios.
En el siglo XVII éste era el pensamiento aplicado para las ciencias, el conocimiento se abría paso y la metodología desarrollada para aquel entonces constaba de inferir conclusiones generales de casos particulares debido a que se observaba una cierta regularidad entre ellos y esa lógica es lo que sugería extraer conclusiones generales.
Este razonamiento lo aplicamos en la cotidianidad desde que nacemos, bajo la premisa de que si algo es cierto en varias situaciones debe serlo probablemente en otras similares o parecidas, es decir que constantemente nos encontramos haciendo asociaciones con hechos previos.
Un ejemplo de razonamiento inductivo: “Tomar una copa de vino al día equivale a una hora de ejercicio”; si se acostumbra a beber licor diariamente por un tiempo prolongado se terminará sufriendo, probablemente, de problemas de salud. Puede que en algunos casos sea favorable para determinadas personas pero no significa que dichos ejemplos sean un hecho comprobado y funcionen de manera universal.
Razonamiento hipotético-deductivo
Este tipo de razonamiento se aplica cuando se necesita conocer un fenómeno y se procede a observarlo, elaborar una hipótesis según algunos conocimientos y observaciones previas para luego someterlos a prueba a través de experimentos.
Su uso es muy común en el día a día, en las ciencias y en otros campos de aplicación, en especial en la programación informática donde se suelen imaginar los posibles escenarios para idear una hipótesis en respuesta a cada uno y su posible resolución tras una puesta a prueba y posterior comprobación.
Es decir para el inicio y desarrollo de la construcción cognitiva en este tipo de razonamiento se pasa por un proceso de observación, indagación, análisis, prueba, exposición y por último demostración de la hipótesis que responde a la realidad.
Razonamiento Lógico
Ante situaciones diarias se aplica el razonamiento lógico, todos los seres humanos hacen uso de este tipo de razonamiento ya que gracias a él llegamos a conclusiones a través del entendimiento.
Se usa para dar respuesta a algo en específico, así se estipula cómo actuar ante determinado fenómeno, aquello que resulta más correcto y sensato de lo que no guiándose con la lógica tras la comprensión y el análisis de situaciones.
Por ende el razonamiento lógico une tanto el deductivo e inductivo debido a que en algún momento del análisis se pasa por ambos procesos de desarrollo cognitivo para poder llegar a la toma de decisiones que va a depender de la conclusión siempre y cuando el resultado del razonamiento sea lógico. Es decir, que responda de forma correcta a reglas y sistemas predeterminados que tengan cierto grado de veracidad.
Actualmente es común identificar el uso de este tipo de razonamiento, es frecuente encontrar que en una entrevista de trabajo, test para iniciar estudios o al hacer algún curso soliciten realizar una prueba de razonamiento lógico ya que el mismo es el que usamos primeramente para dar con la solución de problemas, aspecto muy valorado entre los seres humanos.
De hecho hoy día hay muchas aplicaciones e inclusive juegos que facilitan el desarrollo de esta tipología de razonamiento.