Las placas tectónicas se clasifican en convergentes, divergentes y transformantes, oceánicas y mixtas.
Antes de proceder a la explicación de los tipos de placas tectónicas, conviene explicar que se entiende por estas, pues bien conforme a los estudios geográficos y morfológicos, se logró determinar que la tierra está compuesta por una serie de capas o bien de placas que presenta fracturas a través de las cuales pasa el magna, y se da a lugar a las irregularidades de la superficie terrestre, como son las montañas y los volcanes.
Se les denomino como tectónica, por hacer referencia a que la unión y separación de estas gracias a los movimientos que la magna producción en las mismas, fue lo que género los continentes.
¿Cuáles son los tipos de placas tectónicas?
Convergentes
Son placas que se encuentran unas con otras, de hecho puede considerarse que las mismas chocan levemente, tanto así, que la capa que presenta un borde más delgado, termina siendo un poco absorbida por aquella que cuenta con un borde más grueso.
Esto suele tener a lugar cuando las placas se deslizan y terminan por chocar unas con otras, cuando del choque quedan enlazadas tienen a lugar las formaciones rocosas ascendentes, es decir, las montañas.
Divergentes
En contraposición, tiene a lugar cuando las placas tectónicas se alejan unas de las otras, o mejor dicho cuando estas se separan lo que da a lugar a las cadenas montañosas marinas.
A modo de ilustración, así como existen montañas que se elevan por encima dela superficie terrestre, de igual forma, existen las montañas submarinas, es decir, aquellas que se elevan por encima del suelo oceánico, y que tienden a ser de origen volcánico, estas suelen descubiertas en labores de investigación por los buzos, quienes lo aprecian a escasos metros sobre el fondo del mar.
Dado a que estas se ubican en las profundidades, difícilmente han podido ser estudiadas a plenitud, por lo que los datos que se tienen de las mismas son aproximativos.
Transformantes
Se consideran así, porque las placas no se mueven sino en sentidos contrarios, llegando a ocasionar grandes fallas, es decir, que estas no chocan ni se repelen, sino que se desplazan por completo en direcciones opuestas, generando con ello fallas estructurales en la corteza terrestre.
Estas placas manifiestan la presencia de fallas transformantes, siendo la más conocida de todas la falla de San Andrés, cabe señalar que este tipo de fallas son muy fáciles de percibir habida consideración de que generan una notable y apreciable irregularidad en el terreno.
En lo que respecta a la falla más grande del mundo, se ubica en territorio tanto Estadounidense como Mexicano, arropando las colectividades de California en ambas naciones, dicha falla, como bien se mencionó lleva el nombre de San Andrés.
La presencia de esta falla ha generado que la bahía de San Francisco se acerque a la ciudad de San Francisco, habida consideración de que cada una de las localidades se ubican en lados opuestos, no obstante por los movimientos continuos de la falla, estas se acercan cada año cerca de los 4 y 5 centímetros, efectivamente dichos cambios no son apreciables por los humanos.
Pero si se genera cambio en lo que respecta a las estructuras, llegando a generar fracturas en los acueductos o bien en las carreteras, siendo esta falla un objeto de estudio recurrente por los departamentos de sismología del país, por el riesgo inminente que la misma representa para la sociedad, al poder desencadenar una de las actividades telúricas más poderosas del mundo.
Oceánicas
Se hace de mención de todas aquellas que forman parte de la superficie oceánica, ciertamente estas no pueden ser apreciadas por las personas, al menos que se realicen actividades de buceos especializadas, ya que debe de descenderse grandes latitudes, porque se encuentran en el fondo del mar.
Mixtas
Se trata de aquellas placas que están desprovistas de océano y a la vez cuentan con un poco de él, el hecho de contar con esta conformación, no las dota de una actividad especial, en realidad todos los estudios geográficos han determinado que la mayoría de las placas continentales cuentan con estas características, ya que sus bordes se encuentran inmersos en las aguas.