Las palancas se clasifican dependiendo del grado, distinguiéndose en primero, segundo y tercer grado.
El término palanca alude a una especie de fuerza, o al menos así se concibe en el área de las ciencias exactas (específicamente en la Física), la cual consiste en una herramienta, que por lo general, se trata de una tabla o superficie lisa, que transmite gracias a un elemento colocado en su parte posterior, fuerza y desplazamiento.
Entendiendo en este sentido, la palabra fuerza, como aquella capacidad que tiene un objeto de cambiar su propia dirección de movimiento o bien la dirección de otro elemento. Y el desplazamiento, hace referencia al recorrido que realiza un objeto, desde su punto de origen hacia otra dirección.
¿Cuáles son los tipos de palancas?
Para comprender los grados de palancas, es menester, entender ciertos conceptos como:
- Potencia, es una modalidad de fuerza que se aplica directamente sobre el objeto, la cual, determinará la velocidad de su desplazamiento.
- Resistencia, es una contrafuerza que se realiza en la misma palanca, y que resulta necesaria para realizar los movimientos y el desplazamiento que corresponde, a los efectos de la persona que maneja la palanca.
- Fuerza de apoyo, es la que se produce o bien la que se desempeña por medio del fulcro, es decir, este no es más, que el objeto que se dispone en la parte inferior de la barra o palanca, y que dependiendo de su posición, determinará la fuerza que esta imprimirá sobre el objeto.
Primer Grado
En este caso, el fulcro se ubica en el medio, lo que puede generar una especie de compensación entre la fuerza y la resistencia, en ocasiones este tipo de palancas funcionan a la perfección con las poleas, ya que permiten una distribución homogénea de la fuerza.
En ocasiones, para los trabajos manuales, dicha palanca, suele ejercerse por dos personas, ya que la misma permite generar una fuerza homogénea, un ejemplo común de ello, lo podemos observar en los balancines, los cuales reparten la fuerza hacia cada uno de los extremos.
Pero otro ejemplo, que podemos observar, se encuentra en los alicates, los cuales, presentan en sus brazos una especie de palanca, que encuentran su fulcro en su punto medio, cuando la persona toma el alicate y lo aprisiona con sus manos, transmite una fuerza hacia sus extremos, que permite el agarre del objeto indicado.
Segundo Grado
En dicho caso, el fulcro se ubica en la potencia, con la finalidad de que la resistencia sea mayor, el ejemplo más común de esto, lo vemos en las carretillas, las cuales se presentan con cierta inclinación hacia el frente.
De modo tal, que la persona es la que hace la fuerza por sus brazos al levantarla, sin embargo, dicha inclinación facilita el desplazamiento y el traslado de la misma carretilla, teniendo en cuenta que la resistencia es mayor, por lo que la velocidad de desplazamiento se puede hallar un poco reducida.
Dicho ejercicio, también podemos verlo reflejado en el ejercicio que hacen los seres humanos en el proceso de remar, el remo, actúa como palanca, siendo agarrado por uno de sus extremos, mientras que, el agua, actúa como fulcro, la cual ejerce (sin duda alguna) resistencia.
De aquí, que la velocidad de remar, se uniforme, a medida que el cuerpo vence la resistencia que opone el agua.
Tercer Grado
En este caso, la fuerza que se aplica sobre la palanca es superior a la resistencia, teniendo en cuenta que el fulcro, se halla del lado de la fuerza.
Verbigracia, el mejor de los ejemplos, lo podemos ver en las pinzas de cejas, en cuyo caso, el punto de fuerza se haya ubicado en los extremos de estas, es así, como la persona al tomar dicha pinza y presionar sobre sus respectivos extremos, encuentra que las patas le hace cierta resistencia, que siempre será vencida por la fuerza.
De igual forma, funciona el quita-grapas, el cual, al agarrarse, se debe de ejercer cierta fuerza sobre los extremos, para que así pueda sacarse la respectiva grasa, teniéndose en cuenta, que cuando no se aprisionan los extremos, estos permanecen totalmente abiertos, por lo que la resistencia en estado de reposo, resulta superior a los demás elementos que intercedan.