¿Qué es una analogía falsa?
Las analogías falsas, forman parte de las falacias, que se tratan de engaños lingüísticos que las personas forman con el propósito de engañar a otras, constituyendo falsos razonamientos bajo la forma de premisas ciertas.
Es decir, se trata de una forma de expresión que comprenden una mentira muy bien fabricada, la cual se disfraza a través de recursos como la retórica, el sarcasmo o bien la elocuencia, haciendo no tan visible la falsedad del argumento, sumando a esto también, la fuerza con la cual se expresa para hacerla parecer válida.
La falacia de este tipo, tienden a crear una confusión en el interlocutor, ya que la persona que le emite procede a plantear una comparación incierta entre dos objetos que no guardan similitud entre sí, dando a lugar así a la confusión en las personas, quienes se enredan al creer lo que le están manifestando.
Características de la analogía falsa
Estas se distinguen por presentar los siguientes rasgos:
- Se resuelven a modo de afirmación, en efecto, la fuerza de convicción de las falsas falacias, se funda en el hecho de que las mismas son pronunciadas con términos afirmativos, procediendo así a entablarse una realidad errónea que conlleva al receptor a creer que las mismas son ciertas.
- Se establece una comparación, en toda falacia negativa, la comparación es la figura literaria que se emplea, en efecto, esta pretende resumir en un solo atributivo dos objetos que no tienen nada en común.
- La contradicción en la comparación, efectivamente se plantea una comparación que no tiene pies ni cabezas, ya que las personas se confunden, sin embargo debido a la construcción lingüística a la cual procede el sujeto y la recrea termina por establecer similitud donde no existe ninguna clase de igualdad.
- La absurdez es una característica bastante manifiesta en las analogías falsas, esto sucede siempre a consecuencia de las comparaciones tan disparejas, en efecto, no existe ningún punto de comparación entre los elementos que se reúnen, es por ello, que para aquellos que la evalúan con más calma, aprecian que no existe similitud ni punto de encuentro.
- Existencia de un límite para la comparación, en efecto, no puede establecerse una comparación porque no se puede proceder a la misma, al menos no desde el campo de la lógica plena y convincente, siendo esto así, no hay porque dar por sentada la veracidad de la misma.
Ejemplos de analogías falsas con explicaciones
Para que puedas comprender mejor el asunto, vamos a proceder a continuación a mencionarte unos ejemplos, con sus respectivas descripciones y aclaratorias para que puedas apreciar la absurdez en las mismas:
- Nunca estuve allí porque nunca vine
En algunas ocasiones puede que la falacia o falsa analogía resulte muy evidente, motivo por el cual, las personas suelen considerarlo absurdo, al apreciar un alto grado de redundancia como también de falta de coherencia en el discurso.
En el caso de la expresión antes manifestada, muchos consideran que se trata de una redundancia mal planteada, habida consideración de que no existe conjugación adecuada entre ambos verbos.
- Mi padre no se parece a ningún hombre poderoso como los presidentes de las republicas
En esta comparación se puede apreciar una falsa similitud, e incluso puede contemplarse cierto desprecio hacia las figuras de poder, al rebajarse la importancia manifiesta que debe tener un padre en la vida de una persona, como también la valía que ha de representar un presidente en cualquier país.
Ciertamente si se procede a analizar la misma con lógica, se puede contemplar que no existe punto de comparación alguna entre ambos personajes, ya que cada uno se mantiene en su ámbito y representan roles muy distintos por lo que no existe punto de comparación en sí.
- Lo mismo vale para una sociedad ignorante un atleta que no llega a ganar por falta de méritos que un padre pedófilo aprovechándose de sus propios hijos.
En este análisis, no existe comparación alguna, en efecto, se tratan de dos argumentos con realidades distintas entre las cuales no puede encontrarse comparación alguna, ya que no existe punto de flexión.
Sin embargo, se emplea la comparación para hacer burla ante las perspectivas de la sociedad, que toma dos realidades como una misma, concediéndoles la misma importancia cuando no hay lugar para ellas, es por ello, que en la mayoría de los casos, se puede apreciar que confluyen bajo la forma de sátira, como si se tratase de una crítica por parte de la persona que lo emite.
Son muy comunes estas formas de expresión, con ocurrencia que admiten un modo de manifestación y de crítica hacia las situaciones que imperan en determinado círculo social, siendo comúnmente manifestadas por políticos, oradores y personas que se dedican a hacer frente a las ideologías clasistas y sociales que muchas veces buscan denigrar y crear conflictos internos en el grupo.