Los volcanes se pueden clasificar conforme a dos tipos de criterios a saber cuáles son, por el ciclo de vida o bien por su erupción.
Un volcán es un fenómeno natural que de una forma u otra, corresponde a los devenimientos rocosos de la propia naturaleza los cuales se formaron como consecuencia de la degradación de las rocas, estos volcanes comienzan socavando la tierra hasta generar un punto de erosión por el cual inicia la emanación de lava.
Pese a que para muchos, un volcán no es más que una montaña cuya cúspide presenta cierta salida de humo, el mismo resulta de gran importancia para los geólogos, arqueólogos, gran parte de la comunidad científica de la biología, sin contar la relevancia que presenta para ciertos creyentes de algunas sectas.
La parte superior del volcán lleva por nombre cráter, y este es el punto de salida por el cual emana el conocido humo, la parte inferior del volcán, se denomina base. Esta es la cual dispone las partes más internas de la corteza terrestre, de la cual emana la magna, en realidad es la deformación de la propia tierra y de sus componentes.
Estos son resultado de la propia energía que se acumula en el interior de la corteza terrestre, de aquí que comience a emanar con mucha fuerza hacia arriba, una vez que la temperatura y la presión han llegado a un límite superior de expulsión.
Existen diversas clasificaciones de los volcanes, la primacía de conocerlas guarda gran relevancia para la ciencia, primero para conocer la exactitud de años de un determinado lugar, como también por las medidas de seguridad que deben tener las comunidades aledañas a los mismos.
Clasificación de los volcanes.
Por su ciclo de vida.
Activo.
En este caso, nos referimos a volcanes que pronto van a entrar en erupción, o bien que ya realizaron el proceso de erupción, siendo ello un motivo de alarma para los circundantes.
Este se encuentra activo porque la lava aún puede correr desde el cráter como también puede encontrarse humeando
Extinto.
Son aquellos cuyos estudios geológicos determinan que no volverán a entrar en erupción más.
Inactivo.
Son aquellos volcanes que si bien ya han realizado el proceso de erupción, hoy en día no existe posibilidad remota o alguna de que puedan nuevamente entrar en erupción como tampoco es posible que lo hagan en un periodo de tiempo próximo.
Por su erupción.
Centrales o explosivos.
Son aquellos que concentran en gran medida temperatura y presión de modo tal que emanan de todo su cráter una gran cantidad de composición volcánica, saliendo la lava de forma expedita y expidiendo gran cantidad de cenizas y de humo.
Fisuras o tranquilos.
Son aquellos cuya presión no están excesivas, y la misma resulta evadida por un lado del cráter, es decir, la lava sale a una escasa velocidad o bien la misma sale por medio de una pequeña hendija que se dibuja en el volcán, estos suelen tener pocos momentos de erupción y no representan un riesgo.