Los incendios se clasifican de acuerdo al material combustible, por el lugar, por la magnitud o bien por los riesgos ocasionados o que se corren.
Un incendio es un evento en el cual se produce una combustión como resultado de la reacción química entre dos agentes que ocasionan el efecto de llamarada, la cual consume lo que se encuentra a su alrededor, partiendo del punto de su nacimiento.
Los incendios no son hechos aislados, si bien puede que la mano del hombre no intervenga de forma directa, estos suceden por el roce o bien la predisposición de los agentes cercanos a los que puede provocar la reacción incendiaria.
Lo peculiar del incendio, es que si este, no es sofocado suele ocasionar la acción dómino, ya que a medida que el mismo consume, va reaccionando frente a los demás agentes del ambiente.
La primacía de conocer la tipología de este, reside en poder saber cómo actuar frente al mismo, para evitar destrozos y pérdidas.
Clasificación de Incendios
Según el material combustible.
En este caso se dividen los incendios en cinco categorías a saber cuáles son:
- Clase A: Solidos, tal es el caso del papel.
- Clase B: Líquidos, como es el gasoil.
- Clase C: Gases, por ejemplo, el gas.
- Clase D: Metales.
En efecto por medio de esta categorización lo que se desea indicar, es el agente que provoca el incendio, o bien los agentes que son provocadores del mismo.
Por el lugar.
Urbanos.
Son aquellos que tienen a lugar dentro de los confines de la urbe, en efecto, estos tienen a lugar solamente en los espacios de ciudad desarrollándose con gran velocidad y consumiendo los hogares o bien edificaciones.
Industriales.
Son aquellos que surgen en los espacios de las zonas o bien complejos industriales y que tienen a lugar cada vez que aparece una llamarada en estos mismos lugares, razón suficiente para que en los mismos se conviertan en fuertes conatos, que en ocasiones son muy difíciles de controlar, partiendo de la consideración de los muchos agentes que intervienen en la propagación de los mismos.
Forestales.
Son aquellos que tienen a lugar en los espacios de la naturaleza, estos incendios consumen gran parte de la vegetación y sus efectos se miden y determinan acorde a los perjuicios ocasionados al medioambiente.
Por magnitud.
Conato.
Es el inicio del incendio que apenas a comenzado a consumir un o tres metros de diámetro.
Parcial.
Estos son los incendios que tienen a lugar y que solamente consumen parte de las instalaciones.
Total.
Son incendios que marcan la pérdida y consumo de todo el inmueble e incluso sus alrededores.
Por riesgos.
Ligeros.
Esto en consideración a la fachada o bien estructura del objeto que pueden consumir las llamas, en este caso, un edificio recubierto de metal y piedra presentará menos riesgos ante unos de cartón.
Ordinarios.
Son aquellos en los que intervienen agentes que ciertamente pueden ser objeto de consumo por el fuego.
Extraordinarios.
Los que resultan fácilmente incendiables, como es el caso de una papelería.