La clasificación de Birads, establece la categoría de resultados radiológicos de una mamografía, distinguiéndose tres a saber, cuales son la clase o categoría 1, 2, 3, 4, 5 y 6.
En realidad, esta categorización ha sido tan útil que se ha estandarizado entre los especialistas del cuidado y estudio de las mamas, con el fin de unificar criterios respecto a la misma.
La finalidad de la categorización es aportar luces sobre un diagnostico eficiente que permita evidenciar si hay o no presencia de nódulos, con el objetivo de poder tomar medidas preventivas que no comprometan el órgano, ni las partes anatómicas próximas, que puedan colocar en riesgo la salud de la paciente fémina.
Por otra parte, la prioridad de conocer esta tipología reside en poder establecer criterios unísonos que permitan erradicar el cáncer de mama de forma pronta y evitar así el aumento de las tasas de mortalidad, de la población femenina. Sin más veamos de qué trata dicha clasificación.
Clasificación de los resultados de la mamografía, conforme a Birads.
Categoría 0.
Es aquella en la cual la mama ha sido objeto de estudio superficial, como es el caso de ser sometida a una mamografía base que no permite evidenciar presencia alguna de nódulos; como tampoco permite evidenciar estado de anomalía alguno interno en el seno, siendo meritorio recurrir a otros estudios complementarios.
Categoría 1.
Estudio completo de la mama, en el que los resultados arrogan condiciones normales y estables de la salud mamaria, siendo notorio una masa muscular integra, sin presencia de nódulos ni segmentaciones, en efecto, el estado de salud es benigno y no existen condiciones que coloquen en riesgo la salud de la mujer.
Categoría 2.
En esta evaluación, es posible apreciar ciertas figuras en el resultado que evidencian la presencia de formaciones anormales, como es el caso de las acumulaciones de grasa, tal es el caso de nódulos o bien de quistes de pequeños tamaño, que pueden ser desintegrados con tratamientos, de modo tal que se consideran benignos.
Categoría 3.
Conjunto de estudios que arrogan como estudios presencias de cuerpos formados con leves dimensiones, pero que son perceptibles al tacto de formo sólida; presentándose también casos de lesiones interiores, como leves rupturas, siendo necesario el control médico cada semestre, aun no se puede establecer niveles de malignidad, pero es necesario abordar con tratamiento.
Categoría 4.
En este caso, se observa la presencia de un cumulo de masa disperso pero que cubre gran parte del órgano, pese a que los estudios son solamente observables, las condiciones de malignidad arrogan altos niveles de probabilidad, debiendo de forma urgida acudirse a estudios de descarte.
Categoría 5.
La imagen arroga resultados intermedios, ya que la masa se percibe de forma unificada pero sin bordes que puedan ser definidos, no obstante, los niveles de calcificación se encuentran elevados y son fácilmente perceptibles.
Categoría 6.
Esta es una imagen consecuente, en el caso, de que deviene de forma posterior al diagnóstico de malignidad del seno, de modo tal, que este es un estudio secundario.