Los actuadores se distinguen en hidráulicos, neumáticos, eléctricos y automáticos.
La palabra actuadores, o en singular actuador, deviene del verbo actuar, y hace referencia al hecho, de que una parte es inmersa en un mecanismo con la finalidad de hacerlo actuar, es decir, que el actuador no es más que un elemento que se dispone dentro de una máquina y cuya finalidad es generar alguna clase de movimiento.
Es un dispositivo que es capaz de ocasionar una especie de movimiento, generando con ello, que la propia máquina pueda funcionar, y cumplir con su cometido.
¿Cuáles son los tipos de actuadores?
Hidráulicos
Denominados así, porque para la realización de sus movimientos, requieren de una fuerza que deviene de un líquido, el cual, ejerce una presión sobre el mismo, a fin de movilizarlo, el más común de todos es el aceite.
Son uno de los actuadores más comunes y antiguos, tanto así, que su uso se ha destinado en máquinas pesadas que manejen grandes presiones, de aquí que dichos actuadores impriman una gran velocidad y resistencia a la maquinaria, es por ello, que dada su constante actividad a meritan de un mantenimiento continuo.
Estos presentan como ventajas las siguientes:
Son capaces de accionar con altos niveles de potencia y sobrecarga, siendo una de las máquinas más potentes.
Tienden a generar mayor exactitud en los movimientos, de aquí que los actuadores hidroneumáticos, tiendan a ser puntuales en sus acciones.
Dada su constante carga, estos bridan respuestas inmediatas, no en vano, se colocan en máquinas de rendimiento continuo.
Efectivamente son uno de los que mayores niveles de velocidad pueden proporcionar.
No obstante, estos suelen presentar una gran desventaja, y es que dado que su vehículo fundamental de trabajo es el aceite, y este debe de trasladarse a grandes presiones y velocidades, lo más común es que existan escapes y fugas de aceite, que ocasionen que la máquina se “navegue” en el mismo, llenados por completo los sistemas, de modo tal, que estos ameritan revisiones y mantenimientos continuos.
Neumáticos
Son aquellos capaces de transformar la energía proveniente u ocasionada por el aire, en movimiento, es decir, que convierten la energía eólica en energía mecánica.
Ciertamente el rango de presión de estos es mucho mejor, ya que el aire a presión puede generar una velocidad mayor, el mayor de los ejemplos se ve representado en los cilindros neumáticos.
Estos se distinguen a su vez, en cilindro simple y cilindro doble, el simple consiste en un cilindro con una sola entrada y una sola salida, la primera recibe la corriente de aire y la transforma en movimiento,
Mientras que el cilindro de doble efecto, es aquel que cuenta con dos entradas, con la finalidad de generar una mayor cantidad de procesos y de retrocesos, es decir, que es un cilindro que cuenta en su interior con una capacidad de transformación única, siendo este uno de los más potentes y más empleados en las máquinas de trabajo pasado.
Eléctricos
Son los empleados exclusivamente en máquinas mecatrónicas, es decir, en aquellas que combinan distintas fuentes de energía, teniendo en cuenta que las mismas pueden convertir el movimiento en energía electrónica o viceversa.
Efectivamente estos son aquellos capaces de ser movilizados por energías eléctricas, para su empleo se requiere el uso de controladores, que son los encargados de nivelar los pases de energía de un circuito a otro, con la finalidad de poder entablar una mayor cantidad posible de funciones y de trabajos.
Ciertamente dada su fuente de poder, estos se constituyen en uno de los actuadores más comunes en el mercado, y que presentan la mayor variedad posible de niveles y de potencias.
Automáticos
Estos pertenecen a una gamma especial de actuadores, que permiten el traslado y la conversión de la energía, por medio de una serie de movimientos e intercambio de fuerzas, pudiendo hallarse presente los otros tipos de actuadores.
Estos se caracterizan por el hecho, de ser sistemas intricados que facilitan el movimiento interno de las máquinas, permitiendo que los mismos puedan trasladarse de un lado a otro, permitiendo la conversión de energía de forma expedita, y asegurando un mayor rendimiento y voltaje de la máquina, en todo caso, este se constituye en uno de los controladores más empleados hoy en día.